Mis amigas se vuelven locas con la aplicación que envejece los rostros, con la famosa FaceApp, una aplicación nada segura. Pese a sus fallos en seguridad o no fallos, según mi chico. Creo mi amor que esta aplicación está diseñada para robar datos aprovechando que todos o casi todos caemos en la tentación de bajarla para mirar nuestra cara vieja y asustarnos. Yo también lo he hecho. Me horroricé con el resultado. La cara que salió no voy a ser yo en mi jubilación fijo. Estoy dispuesta a meterme cuanto botox haga falta para no ver tantas arrugas. No seré una abuela arrugada.
Mi marido, en cambio, no ha caído en la tentación de bajar la aplicación. Está convencido de que FaceApp recopila nuestras caras y guarda la información en Rusia. Yo paso de los rusos. No soy famosa. Pueden borrar mi cara cuando quieran de esa información guardada porque les está ocupando sitio y no sacarán ningún beneficio con ella. Ni siquiera seré la vieja que me pusieron en la pantalla del móvil cuando compré su aplicación y la usé. De eso estoy segura.
Es una aplicación muy criticada. Incluso la critican por aclarar el tono de las personas negras para que se sientan más guapas. La crítica que yo le hago es que está induciendo muchas depresiones. Alguna amiga mía se vino abajo pensando que iba a acabar con las arrugas, ojeras y canas que salía en la foto manipulada como persona mayor.
No os recomiendo FaceApp ni os la dejo de recomendar. Es una aplicación más para entretenerte. Pero no debes obsesionarte con tu imagen de vieja. La consiguen poniendo arrugas sin ton ni son y canas hasta dejarte un pelo blanco grisáceo más feo que un día de entierro. Tal vez es mejor que no la bajes si piensas que te va a deprimir. Es mejor no saber como serás de vieja. Todo llegará y seguro que no serás la anciana que te muestran los amigos de FaceApp.
Mi marido, en cambio, no ha caído en la tentación de bajar la aplicación. Está convencido de que FaceApp recopila nuestras caras y guarda la información en Rusia. Yo paso de los rusos. No soy famosa. Pueden borrar mi cara cuando quieran de esa información guardada porque les está ocupando sitio y no sacarán ningún beneficio con ella. Ni siquiera seré la vieja que me pusieron en la pantalla del móvil cuando compré su aplicación y la usé. De eso estoy segura.
Es una aplicación muy criticada. Incluso la critican por aclarar el tono de las personas negras para que se sientan más guapas. La crítica que yo le hago es que está induciendo muchas depresiones. Alguna amiga mía se vino abajo pensando que iba a acabar con las arrugas, ojeras y canas que salía en la foto manipulada como persona mayor.
No os recomiendo FaceApp ni os la dejo de recomendar. Es una aplicación más para entretenerte. Pero no debes obsesionarte con tu imagen de vieja. La consiguen poniendo arrugas sin ton ni son y canas hasta dejarte un pelo blanco grisáceo más feo que un día de entierro. Tal vez es mejor que no la bajes si piensas que te va a deprimir. Es mejor no saber como serás de vieja. Todo llegará y seguro que no serás la anciana que te muestran los amigos de FaceApp.
