Perfumes para nosotras

Perfumes para nosotras
Un olor distinto para cada momento

sábado, 18 de enero de 2020

Soy Alejandra Rubio



​ Querido fantasma:

 Soy Alejandra Rubio y empiezo a trabajar de manera seria. Hago lo que sé, lo que vi que hacían mi madre, mi tía y mi abuela para conseguir dinero. Mi madre y mi abuela ganaron una pasta en la televisión. Yo todavía no gano mucho. Estoy empezando. Pero seguro que conseguiré el dinero que necesito para vivir en una casa con piscina y jardín. Estoy harta de vivir en un piso. Es horrible tener vecinos oliendo tu comida y escuchando las discusiones que tienes con tu pareja porque tu chico ha usado sin querer tu cepillo de dientes.

 No quiero hablarte del programa en el que trabajo. Todavía no entiendo mucho de qué va la cosa. Sé que lo mío va de cobrar por un trabajo sencillo. No dirijo el programa, sólo opino de esas parejas que hay allí a ver si se le cruzan los amores. Es como hablar de unos vecinos que conoces de vista, pero sabes que se acabarán poniendo los cuernos unos con otros.

 En mi familia sabemos mucho de mal de amores. Mira mi abuela. Pobre. La tenemos llorando a todas horas porque su novio bigotudo se le fue. Yo ya sabía que lo de la abuela Maritere con Edmundo no era serio. ¿Cómo iba a querer follar Edmundo, un concursante de Supervivientes, con una vieja? La abuela no podía darle lo que Edmundo quería. Por eso la dejó. Es una pena ser vieja. 

 Ya te iré contando. O tal vez no te cuente más. Ya veremos. No me gusta escribir gratis. Te mando esta carta para decirte que soy yo, Alejandra Rubio la que ves en la tele. Tal vez no me reconoces. Soy Alejandra Rubio, te repito, la nieta de María Teresa Campos y la hija de Terelu. 


 Besos

 Alejandra Rubio

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