Perfumes para nosotras

Perfumes para nosotras
Un olor distinto para cada momento

miércoles, 23 de septiembre de 2020

Ana Bernal-Triviño denuncia la misoginia ilustrada de las Academias de la lengua

 
El lenguaje es machista. Es la conclusión a la que llega Ana Bernal-Triviño, la primera ponente del webinar sobre la violencia de género durante el confinamiento organizado por la Diputación de Sevilla. Con el desparpajo que la caracteriza, Ana reflexiona sobre la creación del lenguaje machista y nos lleva a la creación de los Estados Modernos en una búsqueda de las primeras palabras que debemos desterrar de nuestro vocabulario.

Como bien dice Ana Bernal-Triviño, con la creación de los Estados Modernos las mujeres quedaron relegadas a la función reproductiva. Su misión en el mundo era perpetuar la especie. La instauración del matrimonio contribuyó al papel de meras reproductoras. No se podía salir de ese papel. Las mujeres que intentaban ejercer papeles distintos al de madre y esposa se encontraban con una caza de brujas.

Empezaba el capitalismo con su división del trabajo por sexos. Los hombres traían dinero a casa. Las mujeres no salían de esa casa. Allí estaba su trabajo, el trabajo al que las obligaba la sociedad. Salirse de ese encasillamiento era caer en la definición de mala madre o mujer perversa. Hoy en día todavía corremos ese riesgo las mujeres que nos atrevemos a negarnos a ser esposas y madres a tiempo completo.

En este contexto, Ana Bernal-Triviño, empieza a hablar en su conferencia de los medios de comunicación como generadores de opinión en la sociedad. No se olvida de mencionar las Academias de la lengua, instituciones en las que hay, según ella, una "misoginia ilustrada". El lenguaje construye y destruye generación tras generación.

Ahora nos encontramos burlas en los medios de comunicación del lenguaje inclusivo. Ana señala al diario "el Mundo" como ejemplo de estas burlas. Pero, como bien dice esta ponente, los cambios empiezan por lo pequeño. Hay que familiarizarse con el lenguaje inclusivo. Ya hemos avanzado mucho. Avanzaremos más.

Nos recuerda la importancia del empoderamiento de las mujeres. El empoderamiento es una estrategia para tener derechos. Desde este empoderamiento hay que analizar el lenguaje utilizado en los medios de comunicación. La prensa le dice a la gente en que pensar, implanta la duda. Sin darnos casi cuenta, estamos siendo influenciados por periódicos, televisiones, radios, Internet.

Ana es contundente en sus afirmaciones. "Si no se tiene en cuenta a las mujeres no hay feminismo". Se fija en las opiniones de periodistas hombres y de periodistas mujeres, y llega a la conclusión de que la mujer periodista es relegada a unas crónicas determinadas. Los hombres periodistas, en cambio, opinan absolutamente de todo y se les acepta para opinar de todos los temas.

El lenguaje construye. Los medios de comunicación, concluye Ana, tenemos que ser críticos. No nos pueden manipular, ejercer una violencia sobre nosotros con el fin de que sigamos perpetuando un papel secundario de la mujer en la sociedad.

María Rey
Economista
-----------------------------




Libre de virus. www.avg.com