El Centro Histórico, Cahors, bien merece una visita. Es un pueblo muy conocido por su buen vino tinto y también porque está en el Camino de Santiago.
Nosotros paramos en esta localidad francesa, pero no pernoctamos. Pasamos casi el día completo. Es una ciudad de unos veinte mil habitantes, muy tranquila.
Visitamos el ayuntamiento, el teatro, la biblioteca. El ayuntamiento y el teatro datan del siglo XIX. La ciudad está dividida en dos por el boulevard. A un lado deja la parte antigua de la ciudad y al otro lado la parte más moderna.
Os recomiendo pasear por el paseo fluvial que tiene el río Lot. No debes perderte tampoco el puente que cruza el río con sus ocho arcos. Lo llaman Pont Valentré. Es el siglo XIV. La catedral tiene unos jardines preciosos. Yo no entré dentro porque soy atea y no me van nada las iglesias y catedrales. Me quedé paseando por los jardines mientras mi marido llevaba a las niñas a su interior para explicarle la antigüedad de aquellas piedras.
Hay más templos religiosos, por supuesto. En el casco histórico hay varias iglesias. También hay unos palacetes muy lindos.
Me gustó el pueblo de Cahors. Es un pueblo muy francés, al lado del río Lot. Me parece un pueblo tranquilo para pasar un día paseando con la familia. Por supuesto, que no me imaginó viviendo en una localidad como el Centro Histórico, Cahors. Los pueblos no te dan muchas oportunidades ni en Francia ni en España ni en ningún país. En una ciudad grande siempre tienen más posibilidades de triunfar.
Nosotros paramos en esta localidad francesa, pero no pernoctamos. Pasamos casi el día completo. Es una ciudad de unos veinte mil habitantes, muy tranquila.
Visitamos el ayuntamiento, el teatro, la biblioteca. El ayuntamiento y el teatro datan del siglo XIX. La ciudad está dividida en dos por el boulevard. A un lado deja la parte antigua de la ciudad y al otro lado la parte más moderna.
Os recomiendo pasear por el paseo fluvial que tiene el río Lot. No debes perderte tampoco el puente que cruza el río con sus ocho arcos. Lo llaman Pont Valentré. Es el siglo XIV. La catedral tiene unos jardines preciosos. Yo no entré dentro porque soy atea y no me van nada las iglesias y catedrales. Me quedé paseando por los jardines mientras mi marido llevaba a las niñas a su interior para explicarle la antigüedad de aquellas piedras.
Hay más templos religiosos, por supuesto. En el casco histórico hay varias iglesias. También hay unos palacetes muy lindos.
Me gustó el pueblo de Cahors. Es un pueblo muy francés, al lado del río Lot. Me parece un pueblo tranquilo para pasar un día paseando con la familia. Por supuesto, que no me imaginó viviendo en una localidad como el Centro Histórico, Cahors. Los pueblos no te dan muchas oportunidades ni en Francia ni en España ni en ningún país. En una ciudad grande siempre tienen más posibilidades de triunfar.